jueves, 26 de mayo de 2011

Harry Rules

Cap. 1
Harry no eligió nacer, no eligió vivir. Tampoco lo hicieron sus padres. Simplemente un día Lara comenzó a notar su vientre más abultado y pocos meses después en su primer y uno de sus últimos llantos Harry tomaba su primera y una de sus últimas bocanadas de aire puro.
Tal vez si Lara hubiera decidido alejarse de todo aquello o si George no hubiera decidido beber o vivir.... Pero todo aquello no sucedió, Harry simplemente nació y creció allí, viendo a su madre trabajar día y noche para que él pudiera comer y tal vez para no recibir una paliza mas de Gerorge.
Asi Harry se crió con George, el cual mucho no hizo. Simplemente se desplomaba en su sillón a ver televisión y beber su cerveza. Para Harry era sencillo, todo su trabajo era ir al refrigerador a tomar una cerveza y alcanzársela a su progenitor; y eso era suficiente para no ser brutalmente castigado.
De todos modos los golpes no debilitaron a Harry, por el contrario, con cada golpe sentía que era más fuerte, cada contusión lo convencía que tenía que hacer todo lo posible por salir de aquello, por llevar una de esas felices vidas que se veían por televisión.
Entrando a la adolescencia las ambiciones de Harry no eran demasiadas, todo lo que quería era ser un gran deportista, ser popular y estar acompañado de una porrista.
Y sus objetivos no tardaron en concretarse. Harry era rudo, los golpes lo habían hecho fuerte de cuerpo y de espíritu. Además tenía un objetivo bien claro, decidido por él mismo desde muy pequeño, nadie le había dicho qué tenía que hacer. Tenía la convicción que en esa vida de popularidad se encontraba la felicidad que tanto merecía. Un derecho que la vida le estaba debiendo por todo el sufrimiento que pasaba. Además nadie puede soportar tanto sufrimiento por mucho tiempo, es necesario parar y salir a respirar, tener un recreo, un momento de seguridad, una fracción de Paz.
Cabe aclarar que Harry no era un intelectual ni nada similar. Las herramientas que la vida le había dado eran bastante rudimentarias: algo de simpatía, bastante seducción y mucha capacidad para someter a aquellos que ya tenían casi todo y que sería muy injusto que también tomaran aquel lugar que él pretendía y, por supuesto, merecía.
La popularidad era suya. Otros podrían tener intelectualidad, dinero, una hermosa familia esperándolos en un cálido hogar.... en fin, Harry carecía de todo aquello, pero había ganado su lugar. Capitán del equipo de football, líder del grupo más popular de la preparatoria, dueño de un hermoso Cadillac rojo Cabriolet y novio de la hermosa Mary.

Cap. 2
Mary era inalcanzable, especialmente a los ojos de Stewart, o Stewie como le llamaba su madre. Para él Mary era una especie de ángel que iluminaba todo a su alrededor. A tal punto que no se sentía merecedor de mirarla directo a sus ojos, de intercambiar una mirada. Cuando ella alzaba su vista hacia Stewie (sólo por casualidad), él miraba hacia al piso, no soportaba ver de frente tanta belleza y saber que no estaba a su alcance.
Si por lo menos ese zopenco de Harry no lo humillara tanto, tal vez conseguiría llamar la atención de Mary. Pero Stewie no había elegido ser un perdedor, simplemente la vida lo hizo asi.
¿Cómo Mary no veía sus grandes características? ¿Cómo podía estar con ese imbécil de Harry? Si Stewie era inteligente, sus calificaciones y su gran participación en el torneo anual de matemáticas lo avalaban.
No tendría un Cadillac, pero podría ofrecerle un lugar ameno en su casa. Su madre podría cocinarles unos panqués con mantequilla de maní y juntos podrían ver su colección de estampillas junto al hogar de la sala. Además estaría rodeada de sus amigos, totalmente fieles y, seamos sinceros, completamente inofensivos.
Pero todo aquellos era distante para Stewie, sólo un milagro podría arrebatarle la popularidad a Harry para dársela a Stewie, y a su vez ganar a Mary y entre tanto conseguir no ser mas sometido ni humillado.
No quiero entrar en grandes detalles. No voy a detenerme en explicar cómo decidió Stewie formar un equipo de perdedores para participar del torneo de football, ni cómo fue que llegó Martin Goodmaker (la estrella recientemente retirada de football) a ser su coach. Lo único que quiero destacar es que los milagros acontecen… y vaya si lo hacen!!!
Esa apretada final con una anotación de Stewie en el último segundo que los llevó a ser campeones, sumado al descubrimiento del intento de soborno por parte de Harry al juez de campo; acto que lo confinó a trabajos forzados en la preparatoria. Todo ello logró que Mary al fin viera a Stewie como un verdadero seductor, en vez de aquel zopenco que ahora se arrastraba en el lodo del campo de deporte para quitar la maleza que crecía en ese lugar dónde antes él era el Rey.
Stewart ahora era feliz.

Cap. 3
Quién podría llegar a decir que Harry iría a perderlo todo… absolutamente todo aquello a lo dedicó su vida y se esforzó con lo más profundo de sus sentimientos para conseguir.
Ahora Harry se encontraba nuevamente con aquella realidad que detestaba. Lo cierto es que ya no poseía popularidad, ni una hermosa novia, ni intelecto, ni un hogar, ni verdaderos amigos, ni….
Aún tenía su Cadillac y mucha, pero mucha convicción. La suficiente para acelerar a fondo ese feroz motor y dirigir aquella maza metálica hacia el acantilado.
Harry no había decidido nacer, no había elegido vivir. Pero si existía algo que había aprendido de Stewart es que lo que no se escoge puede ser revertido.